Puertas secretas

Lo más común cuando uno empieza un blog, es hacer un post de bienvenida. Generalmente, uno se presenta, saluda a su lector y explica el propósito de su blog… ¿Qué tal si nos saltamos todo este bla bla bla y nos centramos directamente en algún tema divertido, misterioso o, porqué no, secreto?

Sí! Cosas que parecen lo que no son, espacios escondidos, lugares invisibles… Puertas secretas!

Cuando uno habla de puertas secretas, piensa en la típica película de miedo en la que el protagonista encuentra al azar una habitación escondida. En las películas, las casas que suelen tener este tipo de puertas son castillos, mansiones o laboratorios de última generación. Ya sea sacando un libro de una estantería, moviendo la lámpara de la pared o apretando un botón… se abre misteriosamente una puerta.

Pero, ¿y si te contará que tu también puedes tener tu propia puerta secreta sin necesidad de haber heredado la vieja propiedad de tu familia y sin ser un espía de la agencia británica? ¡Como lo oyes, en tu piso también puedes esconder habitaciones secretas!

Los arquitectos diseñamos viviendas aprovechando al máximo cada metro cuadrado. Los espacios que eran antes de servicio (como los pasillos por ejemplo) adquieren una doble funcionalidad o simplemente desaparecen.

Por ejemplo, podemos utilizar una estantería del salón para esconder tu dormitorio y crear así tu oasis soñado sin necesidad de más metros cuadrados.

También podemos crear el país de nunca jamás para nuestros hijos gracias a una puerta secreta que les dará acceso a su sala de juego. O simplemente, podemos esconder habitaciones puramente funcionales, como una despensa, en las que no quieres que la gente entre o se fije.

En fin, las posibilidades son infinitas, los límites los pones tú… Así que cuéntame: ¿dónde te gustaría poner una puerta secreta? Explícamelo y nuestro equipo hará todo para que tengas esa habitación escondida…